Un truco infalible para volver loca a tu pareja
¿Estás listo/a para dar el primer paso? Pues sígueme, que te voy a desvelar el secreto:
¡¡El primer paso es dejar de hacer caso a los artículos que pretenden dar trucos infalibles!!
Los trucos infalibles para volver loca a tu pareja no existen. No porque tu pareja sea difícil de contentar, sino porque las personas somos diferentes, y lo que a una persona le parece lo mejor y más placentero del mundo, a otra le puede causar total indiferencia o incluso parecerle desagradable. Esa es la maravilla de los humanos, la diversidad. Y más aún cuando dos diversidades deciden compartir una relación, ¡las combinaciones son infinitas! De hecho, vamos a ir más allá: ni aunque encontraras algo que para ti fuera lo mejor, lo sería en todo los momentos y con todas las parejas. Somos seres en constante evolución, no somos robots que tenemos un cableado definido, todos con las mismas zonas erógenas al mismo nivel, sino que somos cambiantes y nadie puede predecir lo que nos va a gustar.
Salvando las distancias, es como si alguien escribiera una receta titulada “El plato que gusta a todo el mundo”. Es un disparate, porque a uno que no le gusta el pimiento, le encanta el picante, pero a otro el picante le sienta fatal y sin embargo la calabaza le vuelve loco. Que aunque os parezca increíble, no a todo el mundo le gustan las croquetas ¡o incluso el chocolate! Y no pasa nada, porque ahí también se expresa la diversidad, en los gustos y en las preferencias de todo tipo, incluída la erótica.
Por eso, y exceptuando el contexto terapéutico, todo lo que os manden hacer los autoproclamados expertos (que los hay reales, pero seguramente no sean todos los que dicen ser y no caerán en la trampa de lo infalible), hay que tomárselo como un consejo, una idea, algo a lo que se le puede hacer caso pero no es obligatorio probar ni mucho menos es obligatorio que os guste. Porque todos podemos caer en la monotonía de la rutina y quedarnos sin ideas, pero nadie sabe mejor que nosotros lo que nos gusta, lo que no nos gusta, lo que nos viene bien como pareja o lo que nos puede crear frustraciones. No es mala idea buscar y probar ideas nuevas (haced uso de la inteligencia colectiva, ¡podéis encontrar ideas maravillosas!), pero pasadla siempre por vuestro filtro. Si os parece interesante, apuntadlo en vuestra agenda de tareas eróticas pendientes y dadle una oportunidad o más, las que gustéis. Pero no os frustréis si no resulta ser todo lo mágico que os prometieron. La persona que lo escribió lo más probable es que no os conozca a ti ni a tu pareja, y vosotros tenéis el derecho a decidir lo que os gusta y lo que no. Si os llama la atención y os gusta, ¡jugad con ello y disfrutad!
Recuerda: En tu placer mandas tú.